Muchas falacias se vierten sobre lo perjudicial de las descargas para los derechos de propiedad intelectual. Lo que ningún político (español americano) se ha parado a pensar, es en las causas de las descargas en nuestro país. Vamos a resumir brevemente algunas de ellas, aunque seguramente surjan más motivos.
No obstante esto es un ejercicio de raciocinio ante la previsible avalancha de informaciones anti-descarga que nuestros imparciales medios de comunicación verterán tras la no aprobación de la ley española americana «Ley Sinde» (esa que intentaron colar en la LES): http://bit.ly/dWwDO8
Motivos varios para la existencia de descargas LEGALES en España:
– Precios superiores a la media europea, con sueldos medios inferiores.
– Escasa diversidad de productos en venta. Llegan tarde, sin versión original, etc.
Si un usuario quiere consumir una serie, al día siguiente de su emisión en USA, en versión original (subtitulada o no), sin cortes publicitarios, a la hora y ritmo que quiera y con la calidad deseada, sencillamente se encuentra con que ese producto no existe en el mercado.
Las empresas nos quieren imponer cómo y cuando ver los productos.
– Cambio en las costumbres del consumidor. Se apuesta por el streaming y el formato no físico. El cambio tecnológico ha propiciado esta evolución, pero la industria no ha sabido adaptarse. No tienen los medios adecuados de distribución digital ni a un precio razonable.
– Descontento con el modelo de gestión de derechos de autor. No es transparente ni justa la forma en la que se reparten los beneficios entre los autores. No hay retribución directa ni proporcional.
– Ya nos cobran un canon. ¿No se supone que su existencia garantiza la contraprestación de las supuestas ventas no realizadas?
– Cultura consumida vía descargas no se corresponde con cultura consumida vía tradicional.
– Existen medios de retribución a los autores más directos: conciertos, conferencias, etc.
– Se difunde la cultura verdadera, no la impuesta a base de talonario. Véase listas de los 40, premios, etc.
Hasta la llegada de internet, teníamos un espectro cultural sesgado e impuesto, ahora tenemos acceso a toda la cultura mundial. Que no sepan adaptarse las industrias para satisfacer el consumo real que existe entre los usuarios, no es nuestro problema. Pero Sinde, los lobbies y los cuatro de siempre, siguen soltando falacias que, con los medios de comunicación bien controlados, permiten llegar a la clase malinformada (pero numerosa) de este país, para los que descargas supone robar.
ElHombreAntorcha 
Directorio de Noticias
22 diciembre, 2010
MUY BIEN ARTICULADAS tus razones. Un saludo